Hoy brindaré en mis sueños, por ti y por todo lo que nos queda por compartir
Desde las noches más ávidas de deseo, hasta los días en que te veo a mi lado.
Brindaré por aprender y por aprender a quererte de la manera que más nos convenga, mi amor no tiene límites y no dudaré en adaptarme a todo lo que vayamos necesitando.
Brindaré por tu camino y por dejar que el mío discurra paralelo pero sin dejar de tocarse con el tuyo.
Brindo por las noches sin dormir, y por las mañanas sin luz en las que cada paso es un suplicio, pero en las que cada segundo me acerca de nuevo a tus sábanas y a tu cuerpo desnudo, tu aliento cálido y todos esos sueños que puedo volcar sobre tu piel, mientras no te das cuenta, para que tomen vida.
Me beberé todo si hace falta, porque no dejaré de celebrar mis días contigo, despertarme 5 minutos antes o mejor, 5 minutos después y saber que has estado mirándome.
Beberé y seguiré bebiendo, hasta que no me quede más que intentar beber de tu piel, que no me canso de celebrarte en mi vida, hasta cuando parece que no tengo nada que celebrar.
Y es gracias a eso.
A esa sensación de tranquilidad.
A tu mano firme en la noche que nos acompaña.
Mariona*